Después de la Solemnidad de Cristo Rey del Universo que cierra siempre el año litúrgico y marca el inicio del nuevo, la Iglesia empieza a preparar a los fieles para entrar en el tiempo de Adviento.
Por Lawrence Ssimbwa *
El Adviento es un tiempo de espera para la venida del Mesías en la vida de los creyentes. Evoca el tiempo antiguo de espera de la venida del Salvador que duró alrededor de cuatro mil años. Por eso, son cuatro semanas de este tiempo litúrgico a través de las cuales la Iglesia prepara a los fieles para la fiesta de la Natividad de Jesucristo.
Es importante hacernos estas preguntas: ¿de que se trata el tiempo de Adviento? ¿Cuál es su espiritualidad? Se puede entender el Adviento y su espiritualidad de la siguiente manera que se describe a continuación:
Tiempo de preparación
La Iglesia prepara a los creyentes a través de 4 semanas que anteceden a la Navidad con el fin de recibir a Cristo y celebrar con Él su presencia entre nosotros.
En la primera semana de adviento, predomina siempre el mensaje de vigilancia para que los fieles no se descuiden espiritualmente.
La segunda semana se resalta el mensaje de conversión, pues los fieles están llamados a una conversión en todos los aspectos de su vida.
En la tercera semana prevalece el testimonio de la santísima virgen Maria, la mujer escogida por Dios para ser la madre del Salvador.
En la cuarta semana predomina el anuncio del nacimiento del Mesías hecho a la santísima Virgen Maria y a san José.
Este recorrido ayuda a los fieles a prepararse adecuadamente para que el nacimiento de Cristo se haga realidad en su propia vida, en las familias y en todas las estructuras de la vida humana.
Tiempo de conversión
El Adviento es tiempo de conversión. La conversión tiene que ver con la transformación interior de cada persona.
La celebración de la Navidad no puede quedarse en simplemente una celebración meramente exterior, no puede reducirse solo a las celebraciones meramente mundanas, tampoco puede reducirse a un asunto comercial y turístico; debe celebrarse desde la acogida personal de Cristo quien nace para transformar plenamente al ser humano.
Por ello, el Adviento es tiempo para la conversión de la persona que es el enfoque principal del proyecto de la salvación de Dios.
Tiempo para la evangelización
La evangelización es la tarea maestra de la Iglesia, pues ella existe para evangelizar. Para ello, el Adviento es el tiempo propicio para la proclamación del evangelio. La evangelización es el anuncio de Jesucristo y su mensaje. No hay tiempo mejor para proclamar a Jesucristo, el Salvador del mundo, como en este tiempo de Adviento.
En Adviento se enfatiza mucho las dos venidas de Jesucristo, esto es, la venida histórica de Jesucristo y su venida escatológica. Asimismo, se da a conocer la Promesa de Dios que los profetas venían anunciando y cuyo cumplimiento se dio por medio de Jesucristo nacido de la virgen Maria.
Se evangeliza también a través de la novena de Navidad que tiene mucha acogida entre los niños y adultos, los conciertos de cantos navideños, entre otros. En fin, el adviento es un momento importante para la evangelización.
Conclusión
El tiempo de Adviento es muy valioso para el cristiano. Permite que haya conciencia de espera, vigilancia y preparación de parte de los fieles para la llegada del Salvador del mundo.
Este tiempo nos ayuda a conocer la historia de nuestra salvación a través de los profetas que anunciaron la llegada del Mesías. Asi que, si el cristiano no se prepara espiritualmente durante el Adviento, puede ser que tampoco la celebración de la Natividad de Cristo le tenga mucho sentido.
P. Lawrence Ssimbwa, imc, es misionero ugandés en Buenaventura, Colombia.